Diarrea con moco en perros ¿posible colitis parasitaria?
La producción de diarrea con moco y sangre fresca es uno de los síntomas característicos de la colitis parasitaria. Analizamos los principales agentes etiológicos, su tratamiento y pronóstico.
La diarrea con moco en perros es uno de los motivos de consulta más comunes en la práctica veterinaria. En muchos casos está causada por una colitis (inflamación del colon), razón por la cual suele cursar con diarreas de contenido acuoso.
La colitis puede estar causada por diferentes factores, como las infecciones virales, bacterianas o parasitarias.
¿Qué causa la colitis parasitaria?
La colitis parasitaria se produce cuando el sistema gastrointestinal del perro es invadido por parásitos que impiden que se complete correctamente el proceso de digestión. Existen diferentes tipos de parásitos que pueden provocar este problema. La trichuriasis y anquilostomiasis son las afecciones más comunes, pero también se puede producir por una amebiasis, giardiasis y balantidiasis.
Un estudio desarrollado en la Escuela Nacional Veterinaria de Toulouse1 describió que los helmintos más comunes que provocan la colitis parasitaria son: Toxocara canis, Trichuris vulpis, Dipylidium caninum, Uncinaria stenocephala, Ancylostoma caninum y Toxascaris leonina. En el 27,7 % de los perros con colitis parasitaria menores de un año se constató la presencia de nematodos y Ancylostoma mientras que el 23,7 % de los animales mayores de un año presentaron lombrices y Dipylidium.
Los perros contraen estos parásitos a través de distintas vías, desde la ingestión de los huevos o larvas hasta el contacto con pulgas infectadas. La infección también puede producirse debido al contacto con otro animal, heces, tierra, comida o agua infectados, y puede pasar de la madre al cachorro durante la gestación o la lactancia, como es el caso del Toxocara canis, Ancylostoma caninum y Uncinaria stenocephala.
Síntomas de la colitis parasitaria
Si la infección es leve, puede cursar de manera asintomática excepto por una pérdida de peso inexplicable a pesar de que el perro tiene un apetito normal o incluso come más de lo habitual. No obstante, en otros casos la colitis parasitaria cursa con signos de deshidratación y dolor a la palpación en la zona del ciego y el colon ascendente. Asociado a esto, algunos pet parents pueden referir que el perro se muerde el flanco y presenta cambios en su comportamiento habitual.
El principal síntoma de la colitis parasitaria, sin embargo, es la diarrea con moco. Esta se debe a que los parásitos penetran la mucosa hasta la lámina propia, una capa de tejido conectivo en la que se encuentran las células responsables de la función inmunitaria, pequeñas estructuras capilares y estructuras nerviosas.
Como resultado, causan una hiperplasia extensa de la mucosa e infiltración inflamatoria crónica que desemboca en una diarrea mucoide. Vale aclarar que, en algunos casos de colitis parasitaria, como cuando se produce por anquilóstomos, la diarrea también puede ser sanguinolenta, con presencia de sangre roja de manera ocasional.
La presencia de huevos de parásitos en las heces cuando se realiza el examen coprológico de la muestra fecal puede hacer sospechar que existe una colitis parasitaria. No obstante, se estima que aproximadamente el 50% de los perros presentarán una infección oculta, según indica el Handbook of Small Animal Gastroenterology2, por lo que si estos resultados no son concluyentes y los exámenes de sangre y citología no aportan otros datos, valorar tratar para amplio espectro antes de hacer colonoscopia.
En este examen se puede apreciar un colon hiperémico, con cantidades excesivas de moco en el lumen y adherido a la mucosa si la afección se debe a una trichuriasis. Por otro lado, en los casos de giardiasis o afecciones protozoarias se pueden observar procesos ulcerativos. También es habitual apreciar parásitos adheridos a la mucosa.
Aunque no es un signo clínico normalmente asociado a la infección por Leishmania Spp., han sido descritos casos de diarrea crónica de intestino delgado y de intestino grueso como único signo clínico.
Tratamiento y pronóstico de la colitis parasitaria
En la mayoría de los casos de colitis parasitaria el pronóstico es favorable y el animal se recupera rápidamente con el tratamiento. Si la colitis no se resuelve, es probable que exista otra condición subyacente que esté contribuyendo al problema. En algunos casos se puede producir una tiflitis granulomatosa como resultado de la infección por Trichuris trichiura.
El tratamiento consiste fundamentalmente en la aplicación de un antiparasitario. Para la colitis producida por Trichuris vulpis, por ejemplo, se recomienda el fenbendazol por vía oral durante cinco días y luego repetir la dosis a las 3 semanas durante 3 meses. Se trata de un parásito difícil de erradicar y con frecuencia se producen reinfecciones, pues sobrevive bien en el ambiente. No obstante, en los casos de infección por otros parásitos, como en la giardiasis, se prescribe metronidazol o furazolidona.
Para contribuir a que el sistema gastrointestinal vuelva a funcionar con normalidad, se puede recomendar un ayuno de 24 a 48 horas seguido de una dieta rica en fibra, como ADVANCE VETERINARY DIETS DIABETES COLITIS, que brinde más consistencia a las heces y estimule el crecimiento de las bacterias beneficiosas.