¿Qué es la mielomalacia hemorrágica progresiva?
Descripción de la alteración
El traumatismo produce un daño extenso de la vascularización intramedular espinal y como consecuencia, la hemorragia isquémica se extiende craneal y caudalmente desde el punto de la lesión. No es frecuente, pero en todos los casos se trata de una alteración aguda y grave que tiene como consecuencia inevitable la muerte del animal.
No se conoce con exactitud el mecanismo fisiopatológico que la origina, pero parece ser consecuencia de una liberación de sustancias vasoactivas, radicales libres y enzimas celulares producto de la contusión medular y la isquemia.
Esta complicación de la lesión vertebral suele aparecer entre 1 y 10 días después de apreciarse parálisis en el perro como consecuencia de la lesión. Por esta razón, en ocasiones los signos clínicos se manifiestan en el periodo postoperatorio, tras someter al paciente a cirugía para corregir la lesión.
Causas de la mielomalacia hemorrágica
Esta alteración vascular deriva de una lesión medular por:
- Traumatismo que provoca daño vertebral o intervertebral.
- Extrusión discal aguda en enfermedad de los discos intervertebrales. Puede afectar a un 5-10% de los perros que presentan paraplejia sin nocicepción por esta causa.
- Embolismo fibrocartilaginoso de la médula espinal.
Por esta razón, si la parálisis avanza tras el diagnóstico de la lesión medular o aparecen otros signos clínicos típicos de la mielomalacia en las siguientes horas o días, deberá sospecharse la aparición de esta enfermedad.
Síntomas y signos clínicos
La mielomalacia se caracteriza por la aparición de:
- Hiperestesia.
- Fiebre.
- Pérdida de nocicepción que se extiende desde el área medular dañada hacia la zona caudal.
- Pérdida del tono motor y de los reflejos espinales en los miembros inferiores.
- Disminución o ausencia del tono anal.
- Ascenso progresivo de la pérdida del reflejo cutáneo del tronco hacia la zona craneal.
Finalmente, progresa hacia fallo respiratorio cuando la necrosis asciende hasta el nivel del quinto o sexto segmento cervical medular, destruyendo las motoneuronas del nervio frénico y paralizando así el diafragma.
Resolución de la enfermedad
Desafortunadamente, no existe una alternativa médica o quirúrgica para los animales que presentan mielomalacia hemorrágica progresiva. Esta enfermedad progresa paulatinamente en horas o pocos días, y su extensión hacia el sistema nervioso de los músculos respiratorios es irreparable. Por ello, la muerte es inevitable y debe considerarse la eutanasia para evitar un sufrimiento excesivo al paciente canino.
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