Vitaminas para gatos mayores: Beneficios de la suplementación con B12
Los gatos necesitan un aporte constante de vitaminas y minerales, las cuales deben provenir de una dieta completa y balanceada. Sin embargo, en los gatos mayores que sufren enfermedades asociadas a un síndrome de malabsorción pueden producirse pérdidas de nutrientes solubles en agua, como la vitamina B12.
La vitamina B12 en gatos mayores
La cobalamina es una vitamina soluble en agua que interviene en diferentes reacciones bioquímicas y enzimáticas del organismo, por lo que su deficiencia causa trastornos metabólicos y clínicos. No hay que olvidar que los daños que provoca el estrés oxidativo desempeñan un papel protagonista en diferentes enfermedades, por lo que una deficiencia de nutrientes antioxidantes tendrá un efecto negativo sobre el sistema inmunitario y otros marcadores de salud.
En los gatos, la absorción de cobalamina depende fundamentalmente de la función pancreática y la salud de la mucosa del intestino delgado. Las patologías gastrointestinales pueden reducir la semivida de la vitamina B12 de 13 a 5 días, lo que indica un recambio demasiado rápido que haría que los gatos sean más susceptibles que otras especies a desarrollar una deficiencia de esta vitamina, según indicó un estudio realizado por Simpson KW y su equipo1.
Más tarde, investigadores de la Universidad de Texas A&M2 confirmaron que la deficiencia de cobalamina es una anomalía frecuente en gatos con signos clínicos de enfermedad del tracto gastrointestinal. Hallaron una prevalencia elevada (60 %) de cobalaminemia por debajo de lo normal (< 900 ng/L) en 80 gatos con trastornos gastrointestinales acompañados de pérdida de peso, diarrea, vómitos, anorexia e hiperplasia intestinal.
Los gatos con niveles de vitamina B12 por debajo de lo normal fueron diagnosticados con enfermedad inflamatoria intestinal (IBD), linfoma intestinal, colangiohepatitis, colangitis o pancreatitis. Por tanto, los investigadores sugieren que la concentración de cobalamina sérica pueda ser un marcador de enfermedad gastrointestinal subclínica y recomiendan darle seguimiento en la evaluación rutinaria en gatos mayores.
De hecho, otro estudio realizado por Laetitia Jaillardon y colaboradores3 mostró que el 60 % de los gatos hipocobalaminémicos también tenían hiperfolatemia. Estos felinos mostraban un cuadro clínico caracterizado por la diarrea crónica, pérdida de peso, poliuria, polidipsia, vómitos, polifagia, fatiga y disorexia.
Suplementación de vitamina B12 en los gatos
Una investigación llevada a cabo por Hill SA, Cave NJ y Forsyth S4 arrojó el resultado de que los niveles de vitamina B12 en los gatos mayores disminuyen independientemente de la dieta, sobre todo en las hembras. Por eso se recomienda un aporte complementario de cobalamina a todos los gatos que sufran una enfermedad gastrointestinal y cuyas concentraciones de cobalamina sérica sean inferiores a 300 ng/L.
En la actualidad, el protocolo recomendado es el aporte complementario parenteral durante 4 semanas, el cual puede mejorar el peso corporal y reducir la frecuencia de la diarrea y los vómitos. Sin embargo, el grupo de investigación liderado por Anna Salas5 analizó a 11 gatos con edades comprendidas entre los 11 y 18 años que tenían niveles de cobalamina bajos (<290pg / mL) y signos compatibles con un linfoma intestinal. A un grupo le administraron cianocobalamina vía subcutánea (250 µg/semana) durante 6 semanas y una dosis extra 4 semanas después. Otro grupo recibió cianocobalamina por vía oral (100 µg/d) durante 10 semanas.
Las investigadoras tomaron muestras de sangre antes de la suplementación y tras 6, 10, 14 y 18 semanas. A la sexta semana, todos los animales tenían niveles de cobalaminemia normales (844-8679 ng/mL). Por tanto, la suplementación oral de cobalamina (100 µg/día) parece ser efectiva para normalizar los niveles de vitamina B12 sérica en gatos hipocobalaminémicos.
Advance Veterinary Diets Gastroenteric Sensitive Feline permite que los gatos mayores consuman la cantidad de vitamina B12 que necesitan. Este alimento dietético contiene un aporte suplementario de vitamina B12 que ayuda a restablecer la cobalaminemia en gatos con enfermedad pancreática y del intestino delgado, facilitando una mejoría general de la sintomatología gastrointestinal.