Viajar con perros en coche: qué recomendaciones dar en los primeros viajes
¿Puedo tener problemas legales por llevar mi perro en el coche?
A nivel legal, existen ciertos requisitos según la Dirección General de Tráfico (Art. 11.2), aunque la ley no es muy clara sobre cómo deben viajar los perros. El perro puede viajar en el coche siempre y cuando no interfiera en la libertad de movimiento del conductor, su campo de visión o la atención a la carretera, y la única manera de asegurar al cien por cien que esto será así es atando el perro.
Por lo tanto, siempre que el perro no dificulte nada de lo mencionado y vaya debidamente atado, podrá acompañar a su dueño siempre que quiera.
Para cumplir los requisitos legales mencionados arriba es importantísimo que el perro esté bien sujeto cuando viaje en coche.
El Real Automóvil Club de España (RACE) ha realizado distintos ensayos de choque para poder hacer las mejores recomendaciones para viajar en coche con las mascotas de manera segura.
Dependiendo del tamaño del perro, hay una opción mejor que otra. Explicamos los mejores sistemas de retención para los perros:
- Rejilla:
Colocando al perro en el maletero separándolo por una rejilla le permitirá poderse mover libremente. Sin embargo, la probabilidad de lesión grave en caso de tener un accidente es muy elevada.
- Arneses:
Hay de dos tipos: arnés de un enganche y de dos. El primero no es fiable, ya que en caso de colisión el arnés podría romperse y salir el perro despedido hacia delante. El segundo es más seguro, ya que al ser de doble enganche evitaría el desplazamiento del perro en caso de tener un accidente.
- Transportín:
Probablemente el método más seguro para viajar en coche con perros.
Si el perro es de gran tamaño, y dispones de espacio suficiente en el maletero, la mejor opción es colocarlo allí de manera transversal a la dirección del coche y en contacto con los asientos de detrás.
En el caso de los perros de pequeño tamaño, la mejor opción sería colocar el transportín en el suelo del coche, detrás del asiento del piloto o del copiloto.
Ensayos han demostrado que colocar el transportín en los asientos traseros del coche atados con el cinturón no es, para nada, efectivo. El motivo es que en caso de frenazo o accidente el transportín podría romperse y el perro salir despedido hacia delante.
Es bueno tener entrenado al perro a estar en el transportin en casa con el resto de la familia. Si se acostumbra, esto le da protección y si tenemos que llevar al perro en el coche, él se sentirá como en casa.
- Animal suelto:
Aunque parezca obvio es el método más utilizado al viajar en coche con perros. Por ese motivo queremos advertir del peligro de llevar el perro suelto en el maletero, en los asientos traseros o en el de copiloto. En los asientos no solo es peligroso en caso de colisión, sino también en el caso de que el perro decidiera querer acercarse a su dueño, ya que la más mínima distracción podría tener un desastroso final.
Aun así, es importante tener controlada la longitud del arnés, puesto que de ser muy largo, el perro podría chocar contra los asientos de delante.
Existe la opción de colocar el arnés al perro y sujetarlo en algunos de los anclajes del cinturón de seguridad con accesorios adaptados.
Viajar con perros en coche no es tan complicado como se piensan algunos dueños, es más, pueden llegar a ser un gran compañero de viaje. Eso sí, es indispensable entrenar desde muy pequeño, no ser condescendiente. En algunos casos puede administrarse algún relajante o un calmante antes de subir al coche y, por supuesto, siempre valorar la opción más segura para la integridad y bienestar de tu fiel compañero.