Vena cefálica en perros vs yugular: efectos en los valores analíticos
Introducción
Los resultados obtenidos en la evaluación laboratorial de los distintos parámetros sanguíneos pueden verse afectados por varios factores, tanto relacionados con la técnica analítica en sí misma, como con la obtención y el procesamiento de la muestra.
En este sentido la gestación, lactación, periodo de ayuno previo, las variaciones circadianas, tipo de dispositivo usado para la extracción, o incluso el vaso seleccionado para la extracción de sangre, podrían tener una cierta influencia en los valores de diversos parámetros.1,2
El efecto real de algunas de estas situaciones en nuestros pacientes ha sido evaluado por diversos autores. Así, por ejemplo, en relación al tipo de dispositivo usado para la extracción de sangre, un estudio demostró que la obtención de muestras de sangre a través de puertos de acceso vascular (usados para la administración de quimioterapia) varias semanas después de su implantación, podía resultar en diferencias significativas en los valores de albúmina, proteínas totales y potasio al compararlos con valores obtenidos en el mismo vaso contralateral mediante venopunción directa.2 Por otra parte, un estudio realizado en perros concluyó que al menos en cuanto a la evaluación de los parámetros de coagulación habituales, no existían diferencias significativas al comparar los resultados obtenidos por venopunción frente a aquellos obtenidos a través de un catéter venoso.3
Vena cefálica en perro o vena yugular. ¿De dónde obtenemos la muestras?
La vena cefálica en el perro es la mayor vena superficial del miembro torácico. Discurre por la cara craneal del antebrazo, desde el arco palmar superficial en la región metacarpiana hasta desembocar en la vena yugular externa. Su tamaño y facilidad de acceso lo convierten en uno de los vasos sanguíneos de elección, tanto para la administración de medicamentos vía endovenosa como para la extracción de sangre con fines diagnósticos; sin embargo, no es el único vaso sanguíneo del que se obtienen muestras en el perro. Con frecuencia también se obtiene sangre de la vena safena lateral (generalmente más visible en muchos animales, pero también más móvil, lo que puede dificultar su punción) o de la vena yugular externa. La obtención de muestras de la vena yugular externa tiene como ventajas principales la de ser fácilmente identificable y que, al tratarse de un vaso de mayor calibre, la extracción de sangre es, en general, más rápida que en los vasos de los miembros, lo que puede resultar en muestras de mejor calidad, con menor agregación plaquetaria y hemólisis secundaria a la extracción. Por otra parte, esto permite una mejor preservación de las venas cefálicas para la colocación de catéteres periféricos en pacientes a los que se van a administrar medicamentos o fluidos endovenosos.
Algunos autores han investigado las diferencias en los resultados en diversos parámetros comparando muestras obtenidas de la vena yugular con sangre obtenida de la vena cefálica en perro:1,4
- Jensen et al. 1994, evaluaron las diferencias existentes en los parámetros hematológicos (hematíes, leucocitos y fórmula leucocitaria, hemoglobina y hematocrito) y bioquímicos (albúmina, ALT, cloro, creatinina, fructosamina, fosfatasa alcalina, potasio, proteínas totales y sodio) más comunes y concluyeron que las diferencias no eran estadísticamente significativas en la mayoría de los parámetros evaluados, excepto para la creatinina y el potasio, en los que los valores obtenidos en las extracciones realizadas en la vena yugular eran significativamente más elevados que cuando la extracción se realizaba en la vena cefálica. Estos autores concluyeron que probablemente en el caso de la creatinina la magnitud de esta diferencia no tenía repercusión clínica alguna. Sin embargo, en su opinión, las diferencias en el caso del potasio (mediana = 0,15 mmol/l) sí podrían ser relevantes en determinados casos. En cualquier caso, este hecho no ha sido investigado posteriormente.
- Por otra parte, en un estudio posterior se puso de manifiesto que la concentración de lactato podía ser significativamente más alta en muestras obtenidas en vena cefálica comparadas con aquellas de la vena yugular, si bien desde un punto clínico probablemente estas diferencias no sean importantes.4
Conclusiones
Las evidencias disponibles parecen indicar que desde un punto de vista clínico no existen diferencias importantes en los resultados obtenidos durante la evaluación de los parámetros hematológicos y bioquímicos rutinarios cuando se comparan muestras obtenidas de la vena yugular con las obtenidas de la vena cefálica en perro. En cualquier caso, cuando se determinen aquellos parámetros más sensibles de verse afectados (potasio, creatinina o lactato) podría resultar interesante intentar mantener siempre una rutina idéntica. De este modo se facilita la posterior comparación de los resultados.