Nutrición para la insuficiencia renal en perros
Mediante la nutrición podemos mejorar la insuficiencia renal en perros actuando a 3 niveles:
- Mejorando los signos clínicos
- Controlando la macro y la micronutrición
- Retrasando la evolución de la enfermedad
Consumo de agua en la insuficiencia renal en perros
Es básico para evitar la deshidratación del perro mediante el aumento del consumo de agua. En ocasiones esto no es fácil por lo que se puede recurrir a trucos como pulverizar agua sobre alimentos secos o proporcionar alimentos húmedos.
Importancia de la palatabilidad
Los perros con insuficiencia renal pueden sufrir nauseas, vómitos, anorexia, ulceras en el tracto gastrointestinal y alteración del olfato y gusto. Esto trae consigo la disminución del apetito y en ocasiones desnutrición.
La desnutrición empeora la capacidad de cicatrización, aumenta el riesgo de infecciones y disminuye la fuerza. Lo indicado es ir cambiando gradualmente a la dieta renal en un plazo de 2-4 semanas.
Las grasas como aliado en la insuficiencia renal en perros
Aportan el doble de energía que los hidratos de carbono. Tiene buena palatabilidad y aporta vitaminas liposolubles. Estos son los principales beneficios de suplementar la dieta con grasas ricas en ácidos grasos omega 3.
Existen estudios en los que un alto contenido en aceite de pescado, disminuye el número de lesiones renales estructurales, controla la hipertensión arterial y disminuye la proteinuria (Brown 1996).
Los aminoácidos y proteínas
Una dieta adecuada para la insuficiencia renal en perros tiene que tener muy controlado el aporte proteico. Disminuir los catabolitos proteicos mejora los signos urémicos. Además las proteínas, por su alto contenido en fósforo provocan una acidificación metabólica que empeora la función renal.
Es importante que a pesar de la restricción la dieta cubra las necesidades de los perros, para que no se movilicen las proteínas endógenas. También hay que tener en cuenta la calidad de la proteína, tiene que suplir las necesidades de aminoácidos esenciales manteniendo al mínimo la producción de residuos nitrogenados.
El papel del fósforo
La insuficiencia renal en perros provoca con frecuencia hiperparatiroidismo secundario. La restricción de fósforo debe iniciarse desde el principio. Un estudio de Finco en 1992 mostró que un alto contenido de fósforo en la dieta se asociada con una disminución de la tasa de filtrado glomerular más marcada y con una menor supervivencia.
El sodio
Son malos tanto los excesos como los defectos. El exceso puede provocar hipertensión y edemas mientras que la restricción excesiva puede agravar la deshidratación extracelular y acidosis.
Suplementación en vitaminas del grupo B
Hay que aumentar el aporte para compensar su pérdida por la gran diuresis.
Fibra
Las fibras solubles mejoran la salud digestiva (Simpson 1998), además estimulan el crecimiento de la microbiota intestinal (Younes 2004, Verbrugghe 2010).
La microbiota intestinal consume urea plasmática y producen propionato, que provoca ahorro de aminoácidos.
Los antioxidantes
La insuficiencia renal en perros provoca un aumento del estrés oxidativo. Esto empeora la fibrosis intersticial, la glomeruloesclerosis y la hipertensión glomerular. El tejido renal que permanece sano se ve sometido a una hiperfunción, generando muchos radicales libres que necesitan ser contrarrestados.
