La importancia de la fibra en la alimentación de los perros
En la última década la fibra ha ido cobrando más protagonismo en alimentación, debido a la relación que tiene con la microbiota intestinal
La fibra alimentaria es un nutriente fundamental que ha ha sido relegado en la nutrición de los perros. No se considera un nutriente esencial, ya que su deficiencia no implica un fallo en el organismo; de hecho, AAFCO y FEDIAF no han estipulado requerimientos mínimos de fibra. Aún así, en la última década, la fibra ha ido cobrando más protagonismo, debido en parte a los numerosos avances científicos sobre la microbiota intestinal donde reside buena parte del sistema inmune del animal.
Distinguir los tipos de fibra
La fibra alimentaria se podría definir de forma general como aquellos carbohidratos que no son digeribles por nuestro organismo. Aunque existen diferentes clasificaciones, la principal distingue entre fibra soluble y fibra insoluble:
- La fibra soluble se describe como aquella fibra que es capaz de atraer agua, formando geles, y suele estar disponible para la fermentación por parte de la microbiota intestinal. Abarca una gran cantidad de moléculas y formas y su biodiversidad mejora la salud y bienestar.
- Por otro lado, la fibra insoluble suele presentarse con una fibra más inerte y que no suele estar disponible para la fermentación bacteriana (en perros). Básicamente se trata de celulosa, hemicelulosa, lignina y algunos pocos compuestos más.
Beneficios de la fibra en la salud de los perros
Quizá uno de los efectos más reconocidos de la fibra es su acción sobre el tránsito intestinal y la calidad fecal, aunque puede actuar a varios niveles, como explicamos a continuación.
Tránsito intestinal
- La adición de fibra, especialmente la insoluble, incrementa el volumen fecal y ayuda en la laxación, acortando el vaciado gástrico y acelerando el tránsito.
- Por otro lado, también ayuda a dar forma a las heces y retener el agua libre, ayudando en la compactación de estas.
- En casos de diarreas, un contenido mixto de fibra soluble e insoluble puede ayudar a normalizar la consistencia fecal de una forma más precoz. Esto es más notorio en ciertos tipos de diarrea como algunas colitis, que tienen una respuesta muy positiva a la inclusión de fibra. Además, también se han visto beneficios para el manejo de ciertas diarreas crónicas.
- Finalmente, la fibra puede ayudar a resolver la gran mayoría de casos de constipación. La fibra soluble tiene la capacidad de formar geles, facilitando el tránsito, además de un efecto procinético debido a los ácidos grasos de cadena corta (AGCC) derivados de su fermentación. La fibra insoluble, por su lado, aporta más volumen, lo que puede facilitar el tránsito.
Prebiosis
La fibra es el principal nutriente responsable de la prebiosis, y el más estudiado hasta ahora. Un prebiótico se puede entender como aquel sustrato usado por la microbiota intestinal que confiere un beneficio para el huésped.
La principal responsable de este efecto prebiótico es la fibra soluble. Entre la multitud de compuestos considerados fibra soluble, los más estudiados en perros son los fructanos, que incluyen sobre todo fructooligosacáridos (FOS) e inulina, y que han demostrado ser una muy buena fuente fermentable. Al ser fermentados por ciertas bacterias, acaban dando lugar a AGCC, que aportan múltiples beneficios a la salud intestinal. Por ejemplo:
- El incremento de butirato promueve la proliferación, homeostasis y buen funcionamiento de los colonocitos, y además tiene cierta actividad inmunomoduladora beneficiosa.
- La elevación de AGCC también disminuye el pH intestinal, dificultando el crecimiento de bacterias potencialmente patógenas.
Estos compuestos prebióticos, al ser aprovechados sólo por ciertos microorganismos, promueven selectivamente el crecimiento de especies beneficiosas y la diversidad microbiana, ambos considerados aspectos positivos de la microbiota. Además, mediante la regulación de la microbiota y otros mecanismos aún por elucidar, pueden ser de ayuda en alteraciones como la enfermedad inflamatoria intestinal (IBD), osteoartritis, enfermedad renal crónica (CKD) o estimulando el sistema inmune.
Obesidad
La fibra tiene un aporte calórico muy bajo, sobre todo la fibra insoluble, por lo que su inclusión en dietas reduce su densidad energética. Además, hay que sumar el efecto sobre la digestibilidad y la saciedad.
En general, altos niveles de fibra suelen afectar a la digestibilidad de los macronutrientes y, por lo tanto, a la energía que pueden absorber de ellos. Por otro lado, al llenar espacio, atrapar agua y dar volumen, activa ciertos mecanismos de saciedad basados en la distensión. De esta forma, una dieta con niveles elevados de fibra hace mucho más fácil la pérdida de peso en casos de obesidad y ayuda a mantener el bienestar durante este proceso, de una forma natural. La diversidad equilibrada de la microbiota ha demostrado que es capaz de mantener el peso del animal, en caso contrario se produce ganancia de peso.
Regulación de glucosa
La fibra puede ayudar en el control de la glicemia e insulina. Esto es debido, sobre todo, a la porción soluble de la fibra, ya que el gel viscoso que esta genera dificulta la absorción de la glucosa, enlenteciéndola y controlando sus picos en sangre. Esto es especialmente relevante en perros que sufren de diabetes; por ello, la mayoría de las dietas terapéuticas para animales diabéticos tienen una composición alta de fibra.
Otros beneficios
Algunos de los usos alternativos de la fibra, aunque todavía están en estudio, son por ejemplo sus posibles efectos positivos en el control del perfil lipídico, la salud cardiovascular, la nutrición geriátrica y la salud reproductiva.
Conclusiones
La fibra es un nutriente que aporta un gran número de beneficios para los perros y aún sigue siendo bastante estudiada, para presentes y futuras aplicaciones. La variedad de tipos de fibra y sus efectos pueden ser muy distintos y cada caso se podrá ver beneficiado de un tipo distinto. Su papel en la diversidad de la microbiota intestinal es clave para el sistema de defensa activo del perro y su bienestar.
Preguntas
¿Tiene alguna contraindicación la fibra?
La fibra puede ser perjudicial en casos de dismotilidad intestinal, megacolon, constipación severa o sobrecrecimiento bacteriano. Niveles elevados de fibra tampoco serían aconsejables en animales que requieran grandes niveles de energía y animales convalecientes. Finalmente, una excesiva cantidad de fibra soluble puede acabar provocando un empeoramiento en la calidad y consistencia fecales, por lo que el equilibrio es la clave.
¿Hay fibras mejores que otras?
No hay un tipo de fibra necesariamente mejor que otro. Hay fibras con diferente proporción de fibra soluble/insoluble, y, por lo tanto, con distintas aplicaciones médicas, como hemos visto anteriormente. Las fibras de cítricos, la goma guar y las pulpas suelen tener bastante fibra soluble; mientras que las cáscaras, el salvado o la celulosa son más insolubles.
Por otro lado, hay tipos de fibra con más evidencia científica sobre su papel, como los FOS o la raíz de achicoria, y otras todavía por estudiar.
Finalmente, también hay fibras provenientes de ingredientes con otros componentes beneficiosos como polifenoles, en el caso de ingredientes fibrosos provenientes de frutas. Por lo tanto, hay una gran variedad de opciones y dependiendo del objetivo nutricional, unas serán mejores que otras.