Neumotórax espontáneo causado por vesículas y bullas en 12 perros
J Am Anim Hosp Assoc 39[5]:435-445 Sep-Oct'03
VJ. Lipscomb,R J. Hardie, R R. Dubielzig,
Introducción: El Neumotórax espontáneo (NE) ocurre cuando el aire invade le espacio pleural en ausencia de alguna causa traumática o iatrogénica. El origen de este aire suele ser el parénquima pulmonar, y las causa más comunes son las vesículas y las bullas. Las vesículas pulmonares son acumulaciones de aire entre capas de pleura visceral que se forman cuando el aire escapa de dentro del parénquima y viaja a la superficie pulmonar más comúnmente a los ápices pulmonares. Las bullas pulmonares son espacios llenos de aire entre el parénquima pulmonar que proviene de la destrucción, dilatación y confluencia de alvéolos adyacentes. El objetivo del estudio es evaluar de forma retrospectiva los síntomas, los hallazgos radiográficos, la técnica quirúrgica, los hallazgos histológicos, las complicaciones post-quirúrgicas y la evolución a largo plazo en 12 perros en que se diagnosticó esta condición, y compararlo con lo que ocurre en medicina humana.
Resultados: Todos los perros eran o bien de razas grandes o bien con el tórax fino y alargado y presentaban una historia de disnea de inicio agudo y evolución progresiva o intermitente. Las radiografías confirmaron la presencia de neumotórax aunque la evidencia de las vesículas o bullas sólo se observó en un perro. El neumotórax persistió en todos los perros a pesar del tratamiento bien con toracocentesis o con toracostomía con tubo de drenaje. La esternotomía medial reveló la presencia de vesículas o bullas en los márgenes apicales de los lóbulos afectados; los lóbulos craneales estaban más afectados. En diez perros había más de una lesión, y 7 perros presentaban la enfermedad de forma bilateral. La histología del tejido pulmonar extirpado reveló un patrón de anormalidades focales que incluían enfisema subpleural, atelectasis, hipertrofia muscular de los conductos respiratorios y varios grados de inflamación. Estos cambios son indicativos de un proceso crónico pero no se identificó ninguna etiología específica. La histología de estos patrones histológicos son similares a los hallados en medicina humana, sin embargo el tratamiento conservador que falló en estos perros suele ser efectivo en humanos. Uno de los perros sufrió perdida de aire por la línea de sutura y necesitó una segunda intervención. Todos los perros se recuperaron sin ningún problema y sin la aparición de recurrencias en un periodo de seguimiento de 19 meses
Importancia clínica: Los autores concluyen que la patogénesis de las vesículas y bullas pulmonares no está del todo clara. La evolución a largo plazo parece ser excelente después de la resección quirúrgica de las lesiones pulmonares