Toxicidad aguda, subcrónica y crónica del ecadotril en perros
Maertins T, von Keutz E, Goetze L
Am J Vet Res 2000;61:425-429.
Objetivo: Determinar la toxicidad del ecadotril en perros.
Animales: 74 Beagles sanos de entre 4 y 11 meses de edad.
Procedimiento: Para determinar la toxicidad aguda, se administró 2000 mg/kg PO en cápsulas en una sola vez a dos perros y fueron observados durante dos semanas. Para determinar la toxicidad subcrónica y crónica, se administró ecadotril cada día durante 3 meses a dosis distintas (50 mg/kg [n = 8], 100 mg/kg [8], 300 mg/kg [12]) y durante 12 meses (25 mg/kg [n = 8], 50 mg/kg [8], 100 mg/kg [8]), respectivamente. Los perros del grupo control (n = 12 o 8) recibían una cápsula vacía. Se efectuaron exámenes físicos, hematocrito, análisis bioquímicos plasmáticos y urianálisis antes de cada experimento y varias veces durante la prueba. Los perros fueron eutanasiados al final del experimento y se realizó la necropsia.
Resultados: Los perros que habían recibido una dosis de 2000 mg/kg de ecadotril desarrollaron signos clínicos no-específicos de toxicidad. Los perros que recibieron 300 mg/kg/día de ecadotril durante 3 meses desarrollaron una marcada anemia, supresión de la médula ósea y algunos signos de afección hepática. No había evidencias de un efecto acumulativo con el tiempo y la reversibilidad de los efectos tóxicos era evidente. Los perros que recibieron 100 mg/kg/día de ecadotril o menos durante 3 o 12 meses toleraron la terapia sin efectos aparentes.
Conclusiones y relevancia clínica: El grado de toxicidad aguda de una única dosis elevada de ecadotril en perros fue baja. El nivel de no-observación de efectos adversos después de la administración vía oral diaria fue de 100 mg/kg/día: la repetida administración de 300 mg/kg/día revela una afección del sistema hematopoyético.