VT_Tematica_Medicina felina_detail.jpg VT_Tematica_Medicina felina_detail.jpg
  • Tiempo de lectura: 5 mins

    Panleucopenia felina: etiología y pronóstico

    La panleucopenia felina es una enfermedad producida por un parvovirus felino muy resistente al entorno. Este es un virus DNA, con especial tropismo por infectar células con alto grado de división como por ejemplo el epitelio intestinal, la médula ósea o los tejidos linfoides. Es un virus muy contagioso, en parte debido a su gran resistencia al medio ambiente, pudiendo sobrevivir hasta 1 año de manera libre en el entorno.

    Epidemiología

    La vía de transmisión del virus es oral. Una vez introducido dentro del organismo del gato, el virus se replica en los ganglios linfáticos para después entrar en fase de viremia, invadiendo el torrente sanguíneo.

    Si la panleucopenia se ha producido durante la gestación o de forma neonatal, el virus puede provocar una destrucción de las células del cerebelo, causando un daño irreversible a este nivel.

    Informe: tratamiento dietético de la diarrea y/o vómitos en felinos

    La panleucopenia felina suele producirse en gatos no vacunados menores de un año. Estacionalmente aumenta el número de infecciones a finales de verano y otoño.

    Síntomas

    Los síntomas principales de la panleucopenia son los vómitos, la deshidratación grave, la fiebre de hasta 40ºC, la depresión, la anorexia y diarrea que puede estar asociada a melenas e ictericia.

    En el caso de que se haya producido daño a nivel del cerebelo por una infección temprana el gato tendrá ataxia, movimientos exagerados y posturas anómalas. El daño neurológico, al ser debido a una agresión puntual y no tratarse de un proceso neurodegenerativo, no progresa con el tiempo.

    Tratamiento

    No existe un tratamiento curativo para la panleucopenia, pero es de vital importancia administrar un tratamiento sintomático y de soporte adecuado para el estado del animal. El tratamiento debe administrarse de manera precoz y agresiva.

    Debido a los vómitos, las diarreas y la fiebre se produce una grave deshidratación con lo que el papel de la fluidoterapia es muy importante. Se puede administrar Ringer Lactato suplementado con KCl  incluso por vía intravenosa, según el grado de deshidratación.

    Hay que restringir la ingesta de sólidos y líquidos hasta que los vómitos hayan desaparecido completamente. Una vez comienza la fase de mejoría clínica, la reintroducción de líquidos y de una dieta blanda, debe realizarse paulatinamente. 

    Los antieméticos como la metoclopramida pueden ser de gran utilizad en el control sintomático de los vómitos.

    Dada la gran capacidad infectiva del virus, y su presencia en las heces y vómitos del animal, es importante aislar al gato de otros animales y ser especialmente cuidadoso con las medidas higiénicas.

    Las vacunas existentes en el mercado contra la panleucopenia felina son muy eficaces en la prevención de la enfermedad, por ello se recomienda repetir la vacunación anualmente.

    En el caso de gatas gestantes no está indicada la administración de vacunas atenuadas, ya que podrían dañarse las células del cerebelo, provocándose un daño neurológico irreversible con secuelas importantes.

    Pronóstico

    Si un gato se recupera de la panleucopenia felina adquiere inmunidad de por vida. El pronóstico depende del estado en el que el gato llegue a la consulta.

    Descarga los requerimientos nutricionales para gatos esterelizados