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    Resultados de la perforación crónica de la membrana timpánica en perros: estudio retrospectivo de 34 orejas

    En este estudio se realiza una búsqueda retrospectiva en los registros médicos de perros con perforaciones de
    • En este estudio se realiza una búsqueda retrospectiva en los registros médicos de perros con perforaciones de membrana timpánica (MT) observadas durante tres o más meses en la Universidad de Colorado. Se detectaron 29 perros, 34 orejas.
    • El seguimiento medio fue de 26,6 meses (rango 3-75). Se reportó ausencia de MT en 20/34 y perforación de MT en 14/34. Las etiologías incluyeron otitis externa/media (OM) alérgica en 15/34 orejas (44,1%) y trozos de hierba en 6/34 (17,6%). En 12/29 perros (41%) la audición se reportó como reducida y en 13/29 perros como adecuada. Nueve perros tenían déficits neurológicos: inclinación de la cabeza ipsolateral (8), parálisis del nervio facial (3), síndrome de Horner (2), ataxia (2) y nistagmo (1). Treinta oídos medios (ME) estaban enrojecidos. La evaluación citológica y el cultivo confirmaron OM bacteriana en 14/30 orejas y Malassezia en 3/30.
    • Todos los oídos recibieron tratamiento tópico. Hubo resolución de ataxia (2/2), nistagmo (1/1), inclinación de la cabeza (4/8) y síndrome de Horner (1/2). En 4/12 perros con audición reducida inicial acabaron con sordera. Hubo pérdida auditiva parcial en 3/13 que tenían inicialmente una audición adecuada. El enrojecimiento se documentó en 15/34 orejas (44.1%). Para los perros con un seguimiento de más de 12 meses, 15/20 orejas requirieron dos o más procedimientos de lavado (PL) (rango 2-7). Las razones para los PL incluyeron restos tisulares (19), prurito ótico (5), inclinación de la cabeza / ataxia (4), ceruminolito (3), infección (3), sacudidas repetidas de la cabeza (3) y audición reducida (3). En 14/29 repeticiones de PL se observaron bacterias, pero no Malassezia en las citologías de oído medio y / o canal horizontal.  En 6/14 casos donde se realizaron PL las citologías de oído medio y / o canal horizontal mostraron una buena correlación. En 2/34 oídos se realizó cirugía por la sospecha de colesteatoma y en 2/34 por una OM recurrente.
    • Los autores concluyen que, en los perros con perforación crónica de MT, generalmente se toleran bien los tratamientos tópicos, es común hallar enrojecimiento en el oído medio, la recuperación neurológica suele ser variable y la necesidad de intervención quirúrgica es rara.
    A. SIMPSON, R. ROSYCHUK, J. SCHISSLER