Presentación de un caso clínico de displasia en perros
En la displasia en perros existe una mala congruencia entre la cabeza femoral y el acetábulo. Esto puede ser por:
- Un desarrollo insuficiente del acetábulo
- Mala orientación del acetábulo
- Mala orientación de la cabeza femoral
El resultado es laxitud coxo-femoral con la subsiguiente inestabilidad articular, que es lo que provoca el desarrollo de la osteoartrosis.
La displasia en perros es una patología hereditaria, por lo que es importante que estos animales no sean destinados a la reproducción.
La displasia en perros no es un problema congénito. Se trata de una enfermedad multifactorial en la que el exceso de alimentación, los factores ambientales y el exceso de ejercicio físico quienes junto con el componente hereditario dan libras a la displasia de cadera.
En general afecta a razas grandes, pero existen perros pequeños como el Cavalier King Charles que también pueden verse afectadas. En el 90% de los casos la afectación es bilateral.
Los síntomas que presentan los perros con displasia son muy variados:
- Ligera cojera
- Paso anormal
- Dificultad para levantarse
- Dificultad para subir escaleras
No hay que olvidar que existe una clara disociación clínico-radiológica.
El diagnóstico se realiza mediante una radiografía con el animal sedado. Existen algunos signos clínicos que pueden contribuir a la realización del diagnóstico.
El signo de Ortolani y el de Bardens pueden ser útiles en animales jóvenes. Si son positivos el perro generalmente será displásico, mientras que si son negativos no se puede concluir nada.
En nuestro país la displasia en perros se clasifica mediante la clasificación elaborada por la F.C.I. (Federación Canina Internacional). Existen los siguientes grados:
- A - Libre de displasia. Apto para la cría.
- B - Forma de transición. Apto para la cría.
- C - Ligera displasia. Se recomienda radiografía posterior 8 meses después.
- D - Displasia mediana. No apto para la cría.
- E - Displasia grave. No apto para la cría
Una vez realizado el diagnóstico de la displasia en perros, el tratamiento dependerá de la gravedad del proceso y de la edad del animal. Este puede ser conservador o quirúrgico.
El tratamiento conservador consiste en analgesia, condroprotectores y ejercicio moderado. Mientras que el tratamiento quirúrgico comprende 3 abordajes:
- Osteotomía de cadera para la displasia acetabular
- Osteotomía femoral para la displasia femoral
- Artroplastia de escisión o de restitución, reservada para animales adultos.
Los problemas traumatológicos de los animales de compañía en ocasiones son un reto diagnóstico, tanto por su amplio diagnóstico diferencial como por la importancia de una exploración física minuciosa y ordenada. En la siguiente formación online presentamos el caso clínico de Kira, una bóxer de 7 años con problemas desde hace unas 3 semanas para levantarse y subir escaleras. Descubre cuál es su diagnóstico final a través de la anamnesis y las diferentes pruebas complementarias. El caso clínico ha sido elaborado por el Dr Josep Font del hospital CANIS de girona, uno de los mejores especialistas en traumatología de España.
