Mastitis perros: Diagnóstico y tratamiento
Mastitis perros: ¿Cómo diagnosticarla?
El diagnóstico se basa en la historia, la clínica y en las pruebas complementarias.
La sospecharemos en perras en período postparto, que padezcan un embarazo psicológico, o en algunos casos tras destetes abruptos o muertes de neonatos que presenten:
- Falta de incremento de peso en la camada (< 5% del peso del nacimiento por día). La salud de los cachorros depende directamente de la calidad de la leche materna, pudiendo ser a veces el único síntoma de la mastitis.
- Afectación local, que según el nivel de gravedad puede ir desde la inflamación hasta la formación de abscesos y gangrena glandular, acompañadas de clínica sistémica (anorexia, fiebre, vómitos) incluso con shock séptico.
- Secreciones hemorrágicas o purulentas.
- Endurecimiento de las mamas, dolor y úlceras.
Pruebas complementarias:
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Test de laboratorio: la analítica puede presentar datos de inflamación como leucocitosis con desviación izquierda o alteraciones plaquetarias en caso más graves. La citología muestra aumento de neutrófilos y de eritrocitos. Se pueden observar bacterias libres o intracelulares.
- Cultivo microbiológico de la leche: guiará el tratamiento antibiótico.
- Ecografía glándulas mamarias: pérdida de la diferenciación tisular, de la ecogenicidad y del flujo sanguíneo.
Es importante establecer un diagnóstico diferencial con la galactosis. En la mastitis es más frecuente observar alteración de color de la leche, fiebre y anorexia, y palpar unas glándulas calientes y dolorosas. En la galactosis suelen estar más afectadas las glándulas craneales, con menor número de neutrófilos y bacterias.
Mastitis perros: ¿Cómo debemos tratarla?
Ha de ser un tratamiento agresivo para que la perra pueda asumir su conducta materna lo antes posible.
Por una parte, existe cierta controversia sobre si seguir amamantando. En general se recomienda continuar con la lactancia natural a excepción de la existencia de abscesos o mastitis gangrenosas ya que la leche infectada o con antibióticos no suele ser un problema para los cachorros, pero debemos tener en cuenta que la composición de la leche será más pobre. En caso contrario, hay que alimentarlos artificialmente. Pueden administrarse probióticos a los cachorros que maman de madres con antibioterapia para prevenir la diarrea asociada a antibióticos. Según un estudio realizado a raíz de un análisis microbiológico se asume que la causa primaria en la mayoría de los casos de septicemia de los neonatos, no parecen ser las bacterias de la leche materna.
En cuanto al tratamiento de la propia mastitis:
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Tratamiento antibiótico de amplio espectro durante 2-3 semanas. En caso de cronificación escoger un antibiótico en base a los resultados del cultivo y del antibiograma. Los antibióticos más usados son:
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Amoxicillina 20 mg/kg PO, IM, SC q 12 hrs
- Amoxicilina/ácido clavulánico 15 mg/kg PO q 12 hrs
- Cefalexina 22-30 mg/kg PO q 8-12 hrs
- Cefoxitina 22 mg/kg IM, IV q 8 hrs
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- Antiinflamatorios para descongestionar y calmar el dolor. Las glándulas infectadas pueden ser ordeñadas periódicamente para rebajar la inflamación. Asimismo, se pueden aplicar compresas de agua caliente. Si se destetan los cachorros se puede disminuir la producción láctea con fármacos antiprolactina (cabergolina)
- Cirugía: el drenaje de los abscesos de glándulas mamarias, la desbridación e incluso la mastectomía son opciones para los casos de mayor gravedad.
Por último, el tratamiento preventivo. Puesto que en la mayoría de casos la infección se produce vía ascendente a través de traumatismos en las glándulas mamarias es importante tanto la higiene de las glándulas como de los cachorros, recortando las uñas de los mismos, así como asegurar que todas las mamas sean utilizadas.